sábado, 25 de agosto de 2012

dOCUMENTA (13)

Eran las 7:50 y ya estaba esperando al grupo en el Hauptbahnhof. Éramos como unas 15 personas las que fuimos a Kassel a ver la exposición de arte dOCUMENTA (13) que es cada 5 años y es muy interesante porque toda la ciudad completa se llena de arte. Los museos, los parques, las calles, las casas, etc. Compramos el boleto para poder entrar a los museos y otras exposiciones en el parque y fuimos primero al Fredericianum.

Hicimos fila como si fuera un jueguito de Disneyland hasta que entramos. Las salas de la planta baja estaban vacías porque el arte era, "sentir la suave brisa". No sé cómo está localizado el museo que desde las puertas principales entraba una corriente de aire que agarraba fuerza en todas las salas. No, no había abanicos ni extractores ni impulsores de aire, nada. Somos ingenieros, buscamos por todas partes y la única entrada de aire que vimos fue la puerta y las ventanas principales. En los pisos posteriores vimos arte, no sé si llamarlo contemporáneo o moderno, perdona mi ignorancia, el caso es que no le entendí nada. A unas salas no entramos porque había que hacer fila otra vez, pero podías ver desde lejos lo que había dentro de las salas con paredes de cristal. Había un par de moscas muertas sobre una placa de mármol que no entendí por qué era arte. También pasamos a una sala donde podíamos agarrar tantas cartulinas como quisiéramos que tienen impresas frases, escritos y dibujos. Yo agarré un buen bonche, solo no pude encontrar una que decía I can see by your fingernails, that you are my brother. En otra sala había cuadros en relieve que se veían muy padre. La única desgracia es que, como el Fredericianum era como un laberinto, nunca llegué a los Dalí. Había dos cuadros de Dalí en exposición que no ví. No buscarlos bien fue, talvez, uno de los errores más grandes que he cometido.

Después fuimos al parque Karlsaue. Vimos la Orangerie, los lagos y ríos del jardín lleno de árboles y pinos enormes. Era un sueño. A lo largo del parque había estaciones, con esculturas, arte interactivo, casitas con exposiciones. Me gustó uno de una mexicana, la exposición se llama Time/Bank y básicamente decía que antes se pagaba con favores, recordabas qué le debías a quién e interactuabas más cuando, hoy en día, el dinero es anónimo lo que permite se puedan adquirir cosas para mal y la persona no sienta responsabilidad alguna. También decía que jamás volverás a encontrar a la misma persona a la misma hora en el mismo lugar. En el parque también vimos un árbol sin hojas que tenía encima la piedra de la sociedad la cual era un obstáculo para el crecimiento completo del "árbol" o sea, la persona. Había unas hamacas donde te metías y te convertías en tamal. Una escultura de un gran fantasma gigante, lechugas, horcas, un tunel, un montículo de residuos biológicos, gente tocando arpa, tambores, guitarra clásica, etc.

Por último entramos al dOCUMENTA Hall que fue mi favorito. Lo primero que vimos fueron pinturas pasteles y unos cuadros enormes que si veías en diferentes planos podías sacar escenarios y edificios distintos. Después hicimos fila para entrar una sala extremadamente colorida y divertida, tapizada con pinturas al óleo. Bajamos a ver motores partidos con los movimientos más divertidos y una sala extraña con imágenes en la pared, luces y sonidos que en tiempos era relajador, en otros despertaba curiosidad e imaginación y a veces también causaba terror.

Regresamos a Marburg y fuimos a un lugar que se llama Mexicali porque iba a haber Salsa Night. Como muchos se habían ido a Frankfurt y otros lugares, solo estuvimos Carmina, Berny, René, Calet el egipcio, Jimmy, Emylia de Turkmenistán, Lily, Pishi, Iván M. y yo. Creo que la semana pasada el ambiente se puso padre porque fuimos como veinte mexicanos y hoy no fue el caso, aunque la pasé bastante bien. A pesar de que el DJ revolvía ritmos y casi todo era merengue y bachata. Bailamos todos un rato, después baile con Berny, luego con Calet quien baila bastante bien para no ser latino. Le pregunté que qué bailan en Egipto y él me contestó que las mujeres bailan mucho belly dance pero en general hay tecno en los antros. Después pusieron la canción de Takatá pero la bailaban con unos pasos como los de payaso de rodeo pero más extraños y difíciles que sólo se sabía la dueña y algunas señoras. El resto de la noche bailé con Pishi hasta que quitaron la música, prendieron las luces y empezaron a recoger porque, la verdad, el lugar era más restaurant bar que antro. No creo que vayamos a regresar. Me quedé con las ganas de un mojito pero costaba eur 7,50 muy caro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario